Imputaron y dejaron preso al policía acusado de extorsionar a su exnovia y de abusar sexualmente de otra expareja
Vuelve a ser noticia la utilización del patrullero y del uniforme para cuestiones particulares e incluso para la comisión delictiva.

Rubén Darío Reynoso , 41 años, empleado de la Policía de la Provincia de Santa Fe, domiciliado en la Ciudad de Reconquista, fue detenido el martes 29 de noviembre de 2022 por orden del fiscal Aldo Gerosa, quien lo imputó dos días después (01/ 12/2022), y al tercer día (02/12/2022), previendo que lo dejen en prisión preventiva -en principio- por los próximos 60 días, para asegurar las pruebas para luego formular la acusación y llevar a juicio. De no ser suficiente, el fiscal podría pedir el estiramiento de la medida cautelar.
Reynoso quedó imputado por extorsiones reiteradas en un número no conocido de ocasiones, y abusos sexuales con acceso carnal , en concurso real de delitos y en calidad de autor.
En el caso trabajan el fiscal Aldo Gerosa , el abogado Federico Gasparutti como querellante en representación de una de las víctimas; Andrés Ghio como defensor; y Santiago Banegas como juez de la investigación penal preparatoria, quien controló las garantías del caso, convalidando la detención del ahora imputado y dispuso su prisión preventiva por 60 días.
En la imputación, justificando ante el juez penal la detención de Reynoso, el fiscal expuso los hechos que consideró fueron extorsiones de Reynoso contra una jovencita oriunda de Lanteri, donde comenzó la relación entre ambos, con 20 años de diferencia de edad. Ella tenía 16 años cuando empezó el noviazgo; él había llegado allí para trabajar en la Comisaría del pueblo.
Sostuvo el representante del Ministerio Público de la Acusación, que Reynoso amenazó e intimidaba a la joven, para conseguir dinero en efectivo y mediante transferencias, aprovechándose que ella tenía acceso a la cuenta bancaria de su padre, de la que faltaron alrededor de un millón de pesos Esa faltante alarmó al padre, y así pudo saber la situación que vivía su hija en manos del entonces aún novio.
Gerosa reveló que pensaba trabajar la causa en estado de libertad, pero, el 16 de noviembre de 2022, los integrantes de una ONG, protección de victimas de violencia de género, puso en conocimiento que la había joven sufrido un ataque de pánico y mucho miedo, porque cuando había ido a la policía a prestar declaración, la llamó Reynoso, y luego comenzó a pasar por delante del negocio donde trabaja la denunciante, en el microcentro comercial de la Ciudad de Reconquista.
No es todo, informó el fiscal que se sumó al expediente un testigo que ha vivido lo mismo con Reynoso, pero que aún no había hecho la denuncia, cosa que hizo el mismo día que se enteró de que Reynoso ya estaba detenido.
Fundamentó la detención de Reynoso por la situación de seguimiento y comunicación con la denunciante ; y por eso tambien justifico el pedido para que el juez lo mantenga en prision preventiva, tal como decidio.
De la investigación fiscal, surgió que Reynoso apareció en relación simultánea con ambos denunciantes, "ya las dos sometiéndolas o cometiendo los mismos hechos, por lo tanto, creo que es oportuno que se tramiten juntos". Así unificó ambas denuncias en el mismo expediente en curso.
Gerosa dijo que Reynoso "intimidaba a la joven, conociendo la vulnerabilidad psicológica y afectiva de la misma, con la que frecuentemente relación afectiva desde que ella tenía 16 años, para que retirara o le transfiriera dinero de la cuenta corriente perteneciente a su padre. En tales circunstancias, la extorsionaba mediante amenaza o intimidación, diciendo que si no lo hacía, "no se iban a ver más"; y "que si no cumplía con lo que él le pedía, se tenía que atener a las consecuencias". en cuenta "su calidad de funcionario público, su mayoría de edad, su experiencia, sabiendo que ella era quien administraba la cuenta de su padre, logrando de esta manera obtener el imputado al menos la suma de un millón de pesos en diferentes ocasiones".
Como otro hecho delictivo, el Dr. Gerosa imputó a Reynoso que durante el lapso de dos años, en el domicilio que compartieron víctima e imputado, amenazó e intimidó a su pareja para que deje de trabajar fuera del domicilio; y la amenazaba para someterla por celos, al control total de su vida.
Vistiendo uniforme y utilizando el patrullero policial , de madrugada se vino desde Lanteri -donde prestaba servicios en ese momento- hasta la vivienda que ocupaban, para controlar que estaba su pareja, a quien llegó a golpear contra un espejo grande de la vivienda, ocasionándole lesiones . Además, la ataca psicológicamente "para atacar su propia autoestima", tirándole los cabellos, dando empujones y golpes.
Como un tercer hecho delictivo, le imputó haber obligado a quien era su pareja, a mantener relaciones sexuales, pese a que la víctima le manifiesta que no quería que siguiera , en dos oportunidades.
Calificación delictiva de los hechos imputados: extorsiones reiteradas en número no conocido de ocasiones; amenazas reiteradas en número indeterminado de veces, en concurso real con lesiones leves, agravadas por el vínculo y por la violencia de género; y abusos sexuales con acceso carnal, todo en concurso real de delitos de artículos y en calidad de autor, según 168, 55 y 149 Bis, párrafos 1°, 55, 89, 92; y por su remisión, artículo 80 incisos 1° y 11°; y artículo 119 párrafo 3°; y artículo 45 del Código Penal Argentino.
Luego de escuchar la imputación del fiscal, el juez que controló las garantías (Dr. Banegas), resolvió declarar la legalidad de la detención por los hechos de extorsión y abusos sexuales, pero declaró la prescripción por el paso del tiempo para el delito de amenazas reiteradas en número indeterminado de veces, en concurso real con lesiones leves, agravadas por el vínculo y por la violencia de género, lo que el fiscal apelaría, para que el proceso avance por todos los hechos imputados. El Dr. Gerosa dejó claro luego de la audiencia, ante el micrófono de ReconquistaHOY, que no comparte con el juez la prescripción de las amenazas. Cree que lo favorece el criterio que en otra causa produjo el juez de la Cámara Penal, Dr. Carlos Rena (caso Rubén Biasioni).
Remarcó además que " la crisis de pánico muy fuerte" que sufrió la denunciante, "demuestra la afectación que sufre la joven, y la actitud de Reynoso ".
Relató que en el marco de la investigación "apareció otra víctima que denunció los hechos que ha sufrido, muchos son similares a los que comentó la primera víctima: la manipulación, las amenazas, el control, los celos, todas esas circunstancias".
Gerosa cree que Reynoso merece "un reproche importante"; y se mostró convencido de la necesidad de mantenerlo en prisión preventiva, porque ya tiene actitudes peligrosas para la causa, ya que cuando fue notificado de que lo habían denunciado, "trató de encontrarse con la víctima para que cambiara o dijera algo causara, más temor en la joven".
La audiencia para establecer medidas cautelares, tal como pidió el fiscal, fue el viernes 2 de diciembre de 2022, donde el defensor acordó con el fiscal y la querella, tal como permite la legislación vigente, que Reynoso permanece en prisión preventiva por el término de 60, hasta el 2 de febrero de 2023, día en el cual se realizará una nueva audiencia a las 11:00 horas, para discutir si continúa o se morigera la prisión preventiva vigente.
Al terminar esta semana tan complicada para el policía, el fiscal expresó a ReconquistaHOY que Reynoso tiene "una habilidad particular para detectar vulnerabilidades o personas con alguna carencia afectiva, o algún problema de esos, que necesitan de alguien que los apoya y que le dé un respaldo, para que, de esa forma, ya través de distintas maneras de intimidación, se haya conseguido extorsionar a la víctima".
Remarcó que "la extorsión es un delito bastante grave, y se ha dado de forma reiterada, con algún tipo de amenazas o coacciones, y siempre dentro del marco de una violencia de género bastante fuerte".
Sobre la primera denunciante, la más jovencita (tiene ahora 21 años), dijo que "tiene un profundo trauma, producido en parte anterior y otra parte agravada por las conductas de este hombre. La intimidaba, la asustaba. Ha estado pidiendo ayuda porque ( Reynoso) la seguía, mensajeaba, la llamaba. Hay un grado de sumisión tal que le anula voluntad... logró conseguir lo que a él le parecía".
Aclaró que no le pedía plata, más bien era una forma de obligar a comprarle cosas, o transferirle a una cuenta para que se compre cosas.
Cuando ReconquistaHOY le preguntó al fiscal cómo se las arregla para poder probar que en una relación de pareja, entre tantas relaciones sexuales consentidas, hubo dos no consentidas, explicó que para demostrar eso, "depende de la credibilidad que tenga la denunciante, y eso se mide en otras ocasiones, principalmente por las consecuencias que le trae la situación a la víctima. Si la víctima demuestra tener un grado de afectación tal que se bloquea o que no puede, que se angustia", ejemplificó.
En casos así, se indicó que "son manifestaciones que son posibles de detectar clínicamente", y de allí se puede obtener "un alto grado de credibilidad" para avanzar en la acusación. Es que son delitos que no tienen testigos, son actos que ocurren en la intimidad.
Enseñó que "la ley obliga -por perspectiva de género- darle igual o más valor que cualquier declaración o del acusado, y ahí se dejó el problema al acusado, a ver como se expresa, cómo dice, qué habla, de qué forma trata de manifestarse frente al tribunal para demostrar que esto ha sido consentido". En ese sentido, aclaró que "la excusa que es consentido es una excusa tan vieja como la humanidad y, por lo tanto, poco creíble".