ReconquistaHoy EmpleosHoy ClasificadosHoy
Para ver esta nota en internet ingrese a: https://www.reconquistahoy.com/a/59884
EL ASESINATO QUE CONMUEVE A LA REGION

Cómo Luna mató a González según su propia versión en tribunales, y la del fiscal. Qué resolvió la jueza y cuál es la estrategia del defensor

Sixto Luna sentado junto al defensor Orlando Toniolo, en tribunales, al ser imputado por matar a Gustavo González.  

Sixto Gabriel Luna, más conocido como "Pocho Luna", de 31 años de edad, domiciliado en el Barrio Belgrano de la Ciudad de Avellaneda, fue imputado por el fiscal Leandro Mai como autor de un "homicidio doloso, agravado por ser cometido con alevosía", en perjuicio de Gustavo González, alias Bill, de 36 años.

Tras escuchar los indicios que expuso el representante del Ministerio Público de la Acusación, la jueza Norma Senn declaró legal la detención y ordenó la prisión preventiva sin plazo, tal lo solicitado por el Dr. Mai; y en contra de la pretensión del defensor público, Orlando Toniolo.

Ahora los detalles del hecho que detalló el fiscal en la audiencia imputativa.

Dijo que el jueves 30 de marzo de 2023, aproximadamente a las 07:00 horas, Luna ingresó "sigilosamente" al domicilio ubicado en el Pasaje Sur al 1181 del Barrio Belgrano de Avellaneda, con la intención de provocarle la muerte a Gustavo Javier González, quien se encontraba durmiendo en el dormitorio, acostado en la cama matrimonial.

Le reprochó haberse "asegurado" que la víctima no oponga resistencia, ya que lo sorprendió mientras estaba descansando, "desprevenida e indefensa" y le asestó numerosas puñaladas con un cuchillo, en la zona de la espalda, tórax, cabeza y brazos, provocándole intencionalmente la muerte, hecho que definió como "homicidio doloso agravado, por ser cometido con alevosía, en calidad de autor", según artículo 80 inciso segundo del Código Penal, que prevé el reproche con pena de prisión perpetua.

Informó que está secuestrada el arma homicida, un cuchillo de 17 cm de hoja con cabo de madera, que al ser hallado tenía restos de sangre.

Destacó que en el imputado "no se encontraron lesiones visibles"; mientras que en su víctima, encontraron "15 heridas, en la región facial, ojo derecho, frontal izquierda, región clavicular, región del brazo izquierdo, región axilar izquierda, cara interior de la muñeca izquierda, cara anterior del brazo derecho, región proximal del brazo derecho y tórax derecho, siendo la causa de muerte, una puñalada que ingresó en la región axilar, la que perforó una arteria pulmonar, generando que la víctima se ahogara en su propia sangre". 

A su turno, el defensor público, Orlando Toniolo, manifestó que no oponía resistencia a la detención de Luna, pero que él sostiene que es "inocente" del hecho imputado, por lo que iba a "resistir" a la pretensión punitiva esgrimida por el fiscal. 

En cuanto a la calificación que hizo el fiscal, Toniolo sostuvo que "es necesario descartar la Alevosía", y para eso se apoyó en el testimonio de la expareja de Luna (Marcela González), quien era la única persona mayor cuando sucedió el hecho. Estaba durmiendo en la misma pieza, en la misma cama, y de su declaración no surge la alevosía; pues entiende que González pudo defenderse, que cuando ingresó Luna a la pieza, González le dijo: ´Qué hacés, Pocho´, y que luego los vio "peleándose". 

Para el Dr. Toniolo, de la declaración de la testigo Marcela González, en cuyo dormitorio y en su presencia fue el hecho, surge que "pelearon", que "confrontaron", que hubo "una lucha", aunque "sin lugar a dudas y a prima facie, parecería que fue desigual, pero lucha al fin".

Recordó que Pocho y Marcela fueron pareja hasta haca "una o dos semanas, no importa el tiempo, pero creo que existe una fuerte presunción de que encontrar a tu pareja en la cama con otra persona, hace posible presumir al menos el estado de "emoción violenta"; entonces -para el Dr. Toniolo- la correcta calificación es "homicidio en estado de emoción violenta", previsto en el artículo 81 inciso 1° A del Código Penal, que prevé una pena de tres a seis años de prisión.

LO QUE DIJO EL MATADOR

Luna decidió declarar ante el tribunal. Expresó que "ella me anduvo buscando para que le consiga plata para la nenita, amenazándome, hice todo lo posible para conseguirle, me fui a las 21 horas, me atendió todo mal, yo ya me di cuenta que cuando se vino a acercar para hablar conmigo, le sentí olor a alcohol, encima yo ya la conozco cuando ella está drogada, estaba tomando cocaína con Bil, salió mala, me habló, se metió adentro y me dejo solo... después me voy a las 23:00 h y pido por favor para hablar con ella, que salió mala, salió con él (con su víctima), amenazándome, que si yo le llego a decir algo o hacer algo a ella, me iba a pegar. Me dejo ahí, quedo él hablando conmigo, me dijo que no la moleste porque me iba a matar, que me iba a hacer algo porque ya no teníamos más nada. Yo le dije que estamos enojados con ella, porque manda a los hijos a buscarme. Eso pasó siempre, las veces que nos dejábamos. Cuando ella está así, cuando ella se droga, lo mismo había pasado con el hijo varón, prácticamente lo crie yo, cuando ella se ponía así, nunca le daba bola, siempre lo dejaba tirado, igual que a mi nenito. Él salió con anemia por falta de comida, ella no se cuido en el embarazo, se vivía drogando a dos manos".

Añadió que cuando se levantó en la mañana del jueves 30 de marzo para ir a trabajar, entre las 06:00 y las 06:30 h, fue nuevamente a la casa de su expareja, y desde la ventana, escuchó a su hijo que "estaba llorando"; y volvió a remarcar que cuando ella está alcoholizada o drogada, no le da artículo ni nada" al hijo.

 Por eso entró por la puerta de atrás, llegó hasta la pieza, vio que estaban teniendo relaciones mientras el nenito lloraba; y luego... "Solamente me acerqué y le dije:

"Qué estás haciendo, cómo vas a hacer eso, Bil"; 

Y me dijo:

"A vos qué te importa, tómatela, sino te voy a matar"; 

Mientras que Marcela decía:

"Dejalo, dejalo que se vaya"; 

A lo que Luna confesó haberle dicho a González:

"Vos estás equivocado, eso es falta de lealtad, amigo". 

"Me empujó y tenía un cuchillo, porque él siempre llevaba un cuchillo a la casa de ella, siempre". Indicó que con ese cuchillo le tiró "dos puñaladas que no me pegaron, le agarre la mano, se lo saqué; y en un momento de bronca, me cegué y lo "apuñalé. Ella se ponía arriba de él, y en ningún momento a ella le hice nada. Después que paso eso, salí afuera, entraron la hija y el hijo, pero en ningún momento me siguieron ni nada. Me fui pensando en lo que hice, si estuvo bien o mal, en un momento a ciegas uno no sabe". 

Reflexionó que "Lo único que me da bronca es que ella, cuando se pone así, descuida a los hijos. Y nunca tuve problemas con los hijos. Nunca les levante la mano, hasta el hijo que se fue sabe. Ella tiene fuertes problemas de adicciones, me apuñaló como dos o tres veces en la mano, no iba a hacer la denuncia ni nada, porque ella no me dejaba salir. Los tres años que estuve viviendo ahí, viví encerrado, salía de trabajar y siempre estaba ahí, no me dejaba ni siquiera hacer mandados, nada, estaba viviendo, no te digo bien ni mal tampoco, pero siempre era problema, era muy celosa, posesiva, hasta mis patrones en el laburo saben que fui arañado toda la cara, con el ojo morado, todos me aconsejaban que me aleje.... Lo único que quiero, solamente, es que saquen a mi hijo de ahí. Y eso de que estuvo tomando alcohol toda la noche, es mentira. Estaban consumiendo, porque las veces que iba él, ahí, me sacaba afuera porque me decía que no tenía que escuchar las cosas de los delincuentes". 

El fiscal le preguntó al matador si sabía que González era amigo de su expareja, a lo que respondió: "Yo tenía entendido que eran conocidos. No sabía que eran amigos y que pasaba algo más, no sé qué clase de amistad era". 

LA ESTRATEGIA

Ya con la confesión de Luna, la estrategia de su defensor es morigerar la pena.

Sixto Luna, cuando se aprestaba a que le saquen las esposas para sentarse a escuchar la imputación del fiscal, el 31 de marzo de 2023.

 

 

Temas en esta nota

homicidio Sixto Gabriel Luna